Fomenta el desarrollo de proyectos escolares a través de la colaboración, destaca el compromiso de los estudiantes, los docentes y los equipos directivos.
Promueve la articulación entre distintos establecimientos escolares, la sociedad civil y diversas organizaciones que comparten el desafío de potenciar la continuidad de estudios.
Motiva a las comunidades escolares a trabajar por un objetivo común y entrega la posibilidad de instalar capacidades permanentes en los colegios, que sean sostenibles en el tiempo.